El 26 de julio de 1876 Arturo Prat Chacón, héroe nacional que participó en el Combate Naval de Iquique, presentó su tesis de grado titulada «Observaciones a la Lei Electoral vijente» [sic], con la cual se tituló finalmente de abogado. Prat analizó la ley electoral en vigor en ese entonces, de 1861, a la luz de la reforma introducida el 12 de noviembre de 1874, que estableció una serie de enmiendas, entre ellas la supresión de la renta como requisito para sufragar. En un tono crítico e innovador, el joven jurista entrega su percepción utilizando sobre todo herramientas hermenéuticas teleológicas, es decir, buscando el genuino espíritu del legislador al momento de establecer la norma. A lo largo de todo el texto es posible notar que Prat era partidario de eliminar cualquier atisbo de lagunas legales, contradicciones o ambigüedades, sugiriendo fórmulas de redacción que excluyesen cualquier duda en la aplicación de la ley electoral. En una época en que la cédula electoral aún no existía (la cédula oficial recién aparecerá en 1925), Prat da luces sobre una gran problemática de la época, que decía relación con que los electores debían conducir sus propios votos a las urnas, los que debían ser de papel blanco, aunque «sin faltar a la lei, puede ser de hilo, de algodon o de seda, todos esencial i visiblemente diversos a pesar de la uniformidad de su color» [sic] (N° XI de la tesis). Su crítica visionaria se materializaría casi 50 años más tarde, con la incorporación de la cédula electoral oficial en el Decreto Ley N° 542 de 1925. No solo como un soldado heroico y valiente es recordado este mártir de la nación, sino como un ciudadano defensor del ideal democrático, pues la tesis de grado de Prat quedó como testimonio de su espíritu respetuoso de la voluntad popular.
Juan Pablo Bravo V.
6 de julio de 2016